¡Ve a la parrilla!
Las barbacoas son una excelente manera de disfrutar el tiempo con la familia y los amigos, y usar una parrilla al aire libre evita que el calor de la cocina entre en tu casa. Las parrillas de gas son las parrillas más vendidas en la actualidad, y hay formas de ahorrar energía y dinero al usarlas; consulte los consejos a continuación.
- No deje que una parrilla caliente funcione inactiva. Solo encienda la parrilla cuando su comida esté lista para cocinarse, y no es necesario esperar más de cinco minutos para que la parrilla se caliente.
- Cocine piezas más pequeñas. Corte los trozos más grandes de aves, carnes, pescados y verduras en secciones más pequeñas, lo que llevará menos tiempo cocinarlos y acelerará el tiempo de servicio.
- Cree zonas de calor alto y bajo en su parrilla. El calor alto es excelente para dorar alimentos, mientras que un calor más bajo terminará el plato. Subir el fuego para tratar de asar los alimentos más rápido solo aumenta el riesgo de quemar el exterior de los alimentos.
- Mantenga la tapa cerrada para mantener la temperatura. Una parrilla descubierta permite que el calor se disipe y baja la temperatura de cocción, lo que desperdicia energía. ¡Sin espiar!
- Use características especiales solo cuando sea necesario. Las últimas parrillas a menudo incluyen quemadores laterales, secciones de calentamiento y otras características de alta tecnología, que quemarán energía si no se apagan.
- Apague la parrilla cuando termine de cocinar. Ahorre energía apagando la parrilla cuando haya retirado todos los alimentos; también, por seguridad, use la válvula de cierre cuando la parrilla no esté funcionando, para que los niños u otras personas no puedan encender la parrilla.
Y consulte estos consejos de seguridad para parrillas de Elizabethtown Gas.
Fuente: MassSave
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